Alejandra Mertens y Eva Gispert conversan sobre qué hay detrás del perfeccionismo y la autoexigencia.
La memoria implica y sensorial de lo que ocurrió en el momento del abandono junto con los patrones recibidos en las respectivas familias adoptivas construyen en ellas toda una serie de estrategias defensivas que les sirven para seguir adelante pero también van haciendo mella en ellas. No saber estar solas, el miedo a decepcionar, a no tener un valor si no triunfan en lo que de ellas se espera, las expectativas de los padres/madres, son algunos de los factores que hicieron que la ansiedad, el insomnio y el colapso terminaran por aflorar. Y también nos cuentan cómo todo ello les ha servido para convertirse en personas que pueden autorregularse emocionalmente y le llega a apasionar tanto lo aprendido que actualmente se dedican a acompañar y compartir profesionalmente todo lo aprendido